No, la profilaxis dental no duele. Es un procedimiento completamente seguro y suave, especialmente cuando se realiza con equipos modernos y técnicas adaptadas para niños. En SaludArte utilizamos instrumentos ultrasónicos que no generan molestias, y acompañamos todo el proceso con paciencia, explicaciones claras y un ambiente tranquilo, para que el niño se sienta cómodo en todo momento.

La primera visita al odontólogo debe hacerse alrededor del primer año de vida o cuando aparece el primer diente.
Sin embargo, las sesiones de profilaxis suelen iniciarse a partir de los 3 años, cuando el niño ya puede colaborar mejor.
Comenzar temprano ayuda a detectar caries iniciales, guiar hábitos de cepillado y crear confianza en el entorno dental desde pequeño.

En SaludArte trabajamos con un enfoque de odontología emocional y adaptada a niños.
Utilizamos un lenguaje sencillo, explicamos cada paso antes de hacerlo y dejamos que el niño explore el entorno para ganar confianza.
Además, evitamos palabras o ruidos que puedan asustarlo, usamos técnicas de distracción y reforzamos la experiencia con elogios y paciencia. El objetivo es que vea la visita como algo positivo y natural.

Lo ideal es realizar una profilaxis cada 6 meses, aunque la frecuencia puede variar según el nivel de placa, hábitos de higiene y dieta del niño.
En algunos casos, si el niño presenta tendencia a formar sarro o antecedentes de caries, recomendamos hacerlo cada 3 o 4 meses.
Estas limpiezas periódicas permiten prevenir caries, mantener encías sanas y evitar tratamientos más complejos en el futuro.

La profilaxis infantil previene la aparición de caries, gingivitis y mal aliento, además de mantener la sonrisa limpia y saludable.
A nivel emocional, ayuda a que el niño pierda el miedo al dentista y desarrolle hábitos de cuidado desde edades tempranas.
También evita tratamientos dolorosos o costosos más adelante, brindando a los padres la tranquilidad de estar cuidando su salud oral y bienestar futuro.